Tras tan largo silencio, pocas palabras. Sólo que me gusta volver a este blog, aunque no escriba, y releer.
Empezamos curso, y con él, nos planteamos qué hacer, cómo vivir, cómo ser felices. Parece como si las personas necesitáramos pararnos periódicamente para no cabalgar sin más sobre este caballo -a veces desbocado- que es la vida.
Empezamos curso, y con él, nos planteamos qué hacer, cómo vivir, cómo ser felices. Parece como si las personas necesitáramos pararnos periódicamente para no cabalgar sin más sobre este caballo -a veces desbocado- que es la vida.
Me alegro por ello: que incluso mi cuerpo me pida a veces parar; que el vacío que siento cuando sólo corro, me recuerde que soy más que lo que hago, que vivo con un por qué. Ojalá no me canse nunca de recordármelo a mí misma y de bucear con vosotras y vosotros para encontrar sentido.
Os dejo entonces porque voy a parar, un rato, en silencio, a ver si posan los encuentros, actividades, emociones,... que he vivido. ¿Te animas tú también?
Os dejo entonces porque voy a parar, un rato, en silencio, a ver si posan los encuentros, actividades, emociones,... que he vivido. ¿Te animas tú también?
T.M.Ll
No hay comentarios:
Publicar un comentario