No, somos personas agraciadas, porque Dios nos ha dado su gracia, nos la sigue dando y nos llama a vivirla. Y su gracia no es otra cosa que un amor fuera de todo lo imaginable que hace a mucha gente entregar la vida, entregarse, en agradecimiento a tanto derroche.
En esta noche me siento agraciada y agradecida y quería sólo comentarlo con vosotros. Os deseo lo mismo, agraciadas y agraciados.
T.M.Ll.
(Imagen tomada de http://www.hoycinema.com/especial/anime-cine/img/Calimero-imagen.jpg)
No hay comentarios:
Publicar un comentario